El pueblo de Venezuela no puede permitir que la mafia les quite a sus diputados. Así de simple, sé que avecinan eventos que cambiarán los años por venir, lo sé y lo lamento, pero la gente está harta y no se va dejar arrebatar a diputados investidos por la soberanía popular por una bandada de ilegítimos tramposos.
Es una lástima, esto pudo evitarse, creo que va a correr sangre, no sé cómo (quisiera gritar) pero me temo lo peor. Los gangsters no se van por las buenas, me lo temía. Pero sé también que el pueblo no tiene miedo. Ruego a Dios que esto se resuelva de manera pacífica.
Los tiempos de héroes se aproximan, sé que en esta tierra aquí hay muchos, también lamento no ser uno de ellos, pero sin duda haré mi parte como ciudadano. Te quiero Venezuela.